El valor de Rizpa

Subió al cerro y lo que vio la paralizó...Cuerpos inertes pendían colgados con una soga alrededor de sus cuellos, eran sus dos hijos y sus cinco nietos. Esta mujer posiblemente ya con unos cuantos años, se vistió de luto, puso un paño sobre una piedra y se acostó sobre ella, se coloco muy cerca de sus seres queridos, ellos habían pagado con sus vidas por…

El anillo

anilloUn joven dijo a su maestro:
- Me siento tan poca cosa que no tengo fuerza para hacer nada. Me dicen que no sirvo, que no hago bien, que soy torpe y bastante tonto. ¿Cómo puedo mejorar? ¿Qué puedo hacer para que me valoren más? El maestro, sin mirarlo, le dijo:
- Cuánto lo siento muchacho, no puedo ayudarte, debo resolver primero mi propio problema.

Quizás después…, – y haciendo una pausa agregó- si quisieras ayudarme tú a mí, yo podría resolver este tema con más rapidez y después tal vez te pueda ayudar. – Encantado, maestro – titubeó el joven pero sintió que otra vez era desvalorizado y sus necesidades postergadas.

El valor de una oración

Señor…
…Ayúdame a decir la verdad delante de los fuertes y a no decir mentiras para ganarme el aplauso de los débiles.

Si me das fortuna, no me quites la razón.

Si me das éxito, no me quites la humildad.

Si me das humildad, no me quites la dignidad.

Ayúdame siempre a ver la otra cara de la medalla, no me dejes inculpar de traición a los demás por no pensar igual que yo.

El emperador y su hija.

maceteroHubo una vez un emperador que convoco a todos los solteros del reino pues era tiempo de buscar pareja a su hija. Todos los jóvenes asistieron y el rey les dijo:

«Os voy a dar una semilla diferente a cada uno de vosotros, al cabo de 6 meses deberán traerme en una maceta la planta que haya crecido, y la planta mas bella ganara la mano de mi hija, y por lo consiguiente el reino»

Las mujeres más hermosas.

Las mujeres más hermosas del mundo no son las que desfilan en trajes de baño y vestidos de noche delante de jueces y de cámaras de televisión.

Las verdaderas finalistas y las ganadoras son aquellas que tienen el brillo interno de la gracia y el perdón.
No hay belleza física que se pueda comparar con la dignidad espiritual o el atractivo de una mujer llena de paz. Es una persona serena porque su confianza