Publicada enVida Cristiana
La pesca.
Cuentan que un día, muy temprano, salio a pescar una persona con mucho animo y contento, ya que presentía que pescaría mucho.
Tenia todas las condiciones perfectas para hacer una gran pesca.
Se monta en su bote, comenzó a remar y llegando no muy lejos de la orilla, allí lanzo el ancla.
Prepara el hilo, prepara la carnada, pero antes de comenzar a pesca