Ser obediente
La moneda y el pez
En Mt 17:27 Jesús manda a Pedro ir a pescar un pez, con la moneda que encontrase en la boca del primer pez, le dice que pague el impuesto del templo de los dos.
Jesús tenía dinero, mucha gente le ayudaba Lucas 8:3, ¿Por qué tan complicado de enviar a Pedro al lago a pescar un pez para pagar el impuesto? Jesús no estaba de acuerdo en pagar este impuesto, Mt 17:26, lo hace por no ofender a nadie, el que lo haga de esta manera tan peculiar, es para indicarnos algo.
Para Dios fabricar una moneda dentro de un pez no es difícil, pero de seguro que no fue así, pienso que eso es lo que Dios quiere trasmitirnos.
Obedecer a Dios
“Aconteció en aquellos días, que Jesús vino de Nazaret de Galilea, y fue bautizado por Juan en el Jordán. Y luego, cuando subía del agua, vio abrirse los cielos, y al Espíritu como paloma que descendía sobre él. Y vino una voz de los cielos que decía: Tú eres mi Hijo amado; en ti tengo complacencia.” Marcos 1:9-11
En la vida obedecemos a un montón de personas, a nuestros padres, abuelos, tíos, a nuestros maestros, jefes de trabajo, a nuestro cónyuge, etc., también obedecemos a nuestras emociones, la ira, el temor, la alegría, etc.