La flecha

Un rey, pasaba en su carruaje por un pueblo, cuando observó una flecha disparada exactamente en el centro de un blanco, que era un círculo dibujado en el tronco de un árbol.

Intrigado, se dió cuenta que además había otras flechas disparadas en varios lugares, todas con la misma precisión en el centro del blanco.

Sorprendido por la habilidad del arquero, mandó a sus pajes a buscarlo.

Después de algunos minutos encontraron al autor de los  disparos.

Se trataba de un niño pequeño de no más de 12 años.