Publicada enReflexiones
Una decisión de última hora.
Fue una decisión de última hora. «Nos regresamos hoy mismo», anunció Pedro Nocón. A todos los que festejaban les cayó mal. Se habían reunido dieciséis parientes, de distintos lugares, para una fiesta familiar, y habían estado muy alegres. Pero por alguna razón que ellos no podían explicarse, Pedro Nocón, de treinta y ocho años de edad, decidió regresarse, con su familia, antes que terminara el evento.
Pedro, su esposa Ampee, y sus hijitas Glorianne de cinco años