Perdónate a tí mismo
Una señorita emigró a los Estados Unidos. En su Cuba natal había sido una católica muy devota, y acostumbraba confesar sus pecados al sacerdote. En su nuevo hogar; afrontó el problema de que no podía confesar sus pecados en inglés. El problema pronto se convirtió en una crisis. Un día supo que había un sacerdote que hablaba los dos idiomas y, después de dar con él, lo convirtióen su confesor.
Pero un día se encontró con la noticia de que su confesor había sido transferido a otra parroquia y el problema se presentó de nuevo. No tenía a quién confesarle sus pecados.
Fiel hasta la muerte.
«Los anales de la historia humana registran unos cuantos casos de gente que estuvo dispuesta a entregar la vida por causa de sus amigos.
La historia de Damón y Fintias, que era muy famosa en el mundo grecorromano. Esto dos hombres vivían en Sicilia en el siglo IV antes de Cristo. Dionisio, el Antiguo, tirano de Siracusa, había decretado que Fintias debía morir
La maestra.
Cuando yo era capellán del ejercito atendí a un soldado moribundo, al cual yo conocía, y le pregunté si quería enviar a su madre algún mensaje conmigo. Me contestó:
-Sí. Por favor dígale que muero con toda felicidad.
Le pregunté otra vez si quería algo más, y me dijo:
El perro fiel
Una pareja de jóvenes tenía varios años de casados y nunca pudieron tener hijos. Para no sentirse solos, compraron un cachorro pastor alemán y lo amaron como si fuera su propio hijo. El cachorro creció hasta convertirse en un grande y hermoso pastor alemán.
El perro salvo, en mas de una ocasión, a la pareja de ser atacada por ladrones. Siempre fue muy fiel, quería y defendía a sus dueños contra cualquier peligro.
Luego de siete años de tener al perro, la pareja logro tener el hijo tan ansiado