Una entrevista con Dios.

Con mi título de periodista recién obtenido, decidí realizar una Gran entrevista, y mi deseo fue concedido permitiéndoseme una reunión con DIOS!!!

-«Pasa» -me dijo  Dios- ¿»Así que quieres entrevistarme?»
-«Bueno», le contesté, «Si  tienes tiempo…»
Se sonrió por entre la barba y dijo:
-«Mi tiempo se llama eternidad y alcanza para todo.»