La mejor ofrenda

Un judío pobre una vez fue al templo sin cordero, ni palomas, ni harina para sacrificar. Se quedó afuera avergonzado, y oyó cantar esta parte del Salmo 51: “Al corazón contrito y humillado no despreciarás tú, oh Dios…” Esto es lo que tenía ese judío, y entró. “Bendito seas”, dijo el venerable rabí,” son pocos los que vienen con tal ofrenda”.

¡Mamá!

mamaAgradece cada día por la existencia de tu mamá, y si no la tienes agradece por haberla tenido.

PORQUE DESPUES YA NADA ES IGUAL…..!!!!!
Cuando viniste a este mundo,
Ella te sostuvo en sus brazos.
Tú se lo agradeciste gritando.

Cuando tenías un 1 año