El misterio de Dios

Dios lo abandonó para probarlo y descubrir todo lo que tenía en su corazón (2 Cron 32, 31). Frente al misterio del pecado, muchas veces sube en nosotros esa pregunta: ¿por qué Dios lo abandonó? Y si la experiencia de pecado se ha dado en nosotros, entonces se hace mucho más quemante la pregunta: Señor, ¿por qué me abandonaste ? ¿por qué dejás que mi corazón se extravíe…

El Paraguas.

En un pueblito de zona rural en los años 50, se produjo una larga sequía que amenazaba con dejar en la ruina a todos sus habitantes, debido a que subsistían con el fruto del trabajo del campo. A pesar de que la mayoría de sus habitantes eran creyentes, ante la situación límite, marcharon a ver al Ministro religioso local y le dijeron:

– «Si Dios es tan poderoso, pidámosle que envíe la lluvia necesaria para revertir esta angustiante situación.»